
Lamento la decisión política del gobierno nacional, y más aún la falta de empatía de entender las consecuencias negativas en el empleo de miles de fueguinos y fueguinas.
Con esta medida se ponen en riesgo más de 8 mil puestos de trabajo de forma directa y otros miles de manera indirecta.
Esta situación realmente nos preocupa y nos ocupa.
Estamos en contacto permanente con representantes de los trabajadores y de las industrias; y con todos los sectores que de una u otra manera se verán perjudicados.
Nuestro compromiso sigue siendo el de contener a los trabajadores, porque sin lugar a dudas, esta decisión sin una visión clara del daño que ocasiona, genera inestabilidad en el sector y atenta nuestra Soberanía.
Es también el momento en que los industriales tendrán que hacer todo lo que tengan que hacer para preservar las fuentes laborales.
Desde nuestro Gobierno vamos a seguir gestionando en defensa de las y los trabajadores y acompañaremos todas las acciones para llevar previsibilidad a tantos hogares fueguinos que dependen de la industria fueguina.